Plan nutricional para llevar un embarazo saludable
Plan nutricional para llevar un embarazo saludable. El embarazo es una etapa de constantes cambios, que requiere de una alimentación balanceada y completa para el adecuado desarrollo del bebé. Es importante la introducción de vitaminas y minerales indispensables para el crecimiento del bebé. Una alimentación balanceada equilibrada en el embarazo, lo ayudará a llegar a término saludablemente.
Es adecuado dejar en el pasado ese falso mito de que al estar embarazada hay que comer por dos, porque si bien ahora son dos en vez de uno, esta afirmación no es del todo cierta. Comer demás en el embarazo puede traer consigo consecuencias bastante negativas para la salud de la futura madre así como para la del bebé. Esto se debe, a que un incremento de peso exagerado predispone a la madre a padecer condiciones como la obesidad, la cual a su vez, puede propiciar la aparición de diabetes gestacional o preeclampsia. Es por esto que el incremento del peso durante el embarazo también debe ser monitoreado con precisa atención. Asimismo la salud del bebé también se encuentra en riesgo al descontrolar la alimentación durante el embarazo. Un aporte inadecuado de vitaminas y minerales esenciales para su desarrollo pueden traer consigo la aparición de enfermedades importantes, como es el caso de las malformaciones consecuentes al mal cierre del tubo neural (espina bífida y anencefalia), provocadas por la falta de consumo de ácido fólico. De igual forma, una madre con diabetes gestacional, causado por el sobrepeso en el embarazo, corre el riesgo de traer al mundo un bebé con macrocefalia, condición que acarrea consigo problemas antes, durante y después del parto.
A continuación te explicamos un plan nutricional, fácil de ejecutar, para que lleves un embarazo saludable:
- No comas demasiado: Come solo lo necesario para saciar tu hambre, no para quedar llena. En vez de servirte mucha cantidad en cada comida, intenta comer 3 comidas principales y 2 meriendas, de este modo reduces la cantidad de alimentos que consumes, aceleras tu metabolismo y sacias los posibles antojos.
- Bebe suficiente agua: La hidratación de tu organismo durante el embarazo es de vital importancia. debes beber de 2 a 3 litros de agua diariamente.
- ¿Qué comer?: Es de muchísima importancia que integres a tu dieta todos los grupos alimenticios: carbohidratos (arroz, pan), proteínas (carnes, huevos, lácteos), grasas (aceites vegetales), frutas (pera, manzana, piña, lechosa, durazno, naranja, etc.), cereales integrales (arroz, avena, cebada) y vegetales (legumbres, hortalizas). Los alimentos deben ser 100 % naturales y de preferencia hechos en casa. El uso de grasa debe ser restringido, ya sea aceites o margarina, disminuye su uso y utiliza en vez de aceites y grasas procesadas, aceites de origen natural. Ingiere las verduras y vegetales en forma de ensaladas, hervidas o al vapor en vez de fritas. Asimismo las proteínas como las carnes y huevos, prefiérelas sancochadas o a la plancha.
- Antojos: los antojos suelen ser inevitables. Si bien no puedes elegir qué te provocará ni en qué momento en específico, es importante sustituir la fuente de tu antojo por alimentos más saludables. Las frutas, los jugos y ciertas verduras pueden ayudarte en esta labor. Tampoco es prudente que te restrinjas del todo, ya que esto puede hacer que caigas en un estado de frustración y desesperación, de vez en cuando puedes darte un gusto, siempre y cuando sea prudente y muy esporádicamente.
- ¿Qué no comer?: No existe tal cosa como ‘alimentos prohibidos’ durante el embarazo, o al menos no es prudente etiquetarlos de ese modo. Pero lo que sí es prudente, es que evites el consumo de alimentos procesados, grasosos o copiosos, frituras, dulces, gaseosas, alcohol, café, etc.
- Suplementos vitamínicos: Es probable que el médico te los recete a penas sepas de tu embarazo. Los suplementos vitamínicos son muy importantes para alcanzar los requerimientos diarios de la vitaminas, minerales y antioxidantes necesarios para que tu bebé se desarrolle y crezca lo más sano posible. Sin embargo, también es importante que integres a tu alimentación diaria esas vitaminas a través del consumo de alimentos que sean una fuente de estas.
- No elabores dietas estrictas: Es importante que la alimentación sea balanceada y equilibrada, no una dieta rigurosa que te estrese.