Cólicos en los bebes
Durante su primer año de vida el bebé experimentará cambios diversos en su sistema digestivo, esto se debe a que en ese tiempo aprenderá a digerir como también a absorber y a excretar, procesos naturales pero que se vuelven complejos en esa primera etapa.
La mayoría de los bebés experimentan malestar y muchas veces dolor en el abdomen durante ese período de adaptación de su organismo. Ese malestar es el que ocasiona que el bebé llore, única manera que tiene para expresar que algo le está ocurriendo.
Algunos bebés lloran por períodos prolongados de tiempo sin tener una respuesta favorable a las diferentes formas que existen para calmarlos, a esto se lo conoce como cólicos.
Podríamos decir entonces que el cólico se traduce en un llanto por parte del bebé que puede darse a lo largo del día y que aparece en las primeras semanas después del nacimiento y se extiende hasta aproximadamente los cinco meses de vida.
Los factores que producen los cólicos son varios pero principalmente pueden ser de origen gastrointestinal y casi el 50% de los bebés sufrirá de estos episodios, ya sean alimentados con leche materna o las leches de fórmula infantiles.
Las causas de los cólicos en los bebes son de origen multifactorial, principalmente de origen gastrointestinal, psicológico o alérgico. Un 40% de los niños sufre cólicos, tanto los alimentados con leche materna como los que toman leches especiales infantiles.
Este trastorno muchas veces impide un buen descanso tanto del bebé como de la madre y eventualmente del resto de los miembros de la familia, ya que el llanto continuo y vigoroso del niño es sumamente estresante.
Para poder sobrellevar este período un tanto difícil es fundamental, en primer lugar mantener la calma e intentar calmar al niño, darle unos suaves masajes en la zona abdominal para tratar de calmar los dolores.
Puede también ser conveniente que el pediatra cambie la leche de fórmula, si el bebé no toma leche materna, por una diferente que puede evitar los cólicos.
Si en cambio toma leche materna ésta no puede cambiarse ya que es una fuente natural de probióticos (bacterias beneficiosas para la salud y bienestar del bebé) sobre todo los denominados lactobacilos importantes para el intestino y la función digestiva del bebé.
Además, la leche materna contiene un probiótico llamado L.reuteri, el cual es eficaz para los problemas de cólicos del bebé y beneficioso para el desarrollo de su flora intestinal.
Por lo tanto, ante los problemas de cólicos será necesaria mucha paciencia, y atención constante para acondicionar al bebé de manera tal que los dolores sean menos intensos, ya que se trata de un proceso natural sobre el cual no puede tenerse un control y que de manera natural irá desapareciendo.