Ejercicios permitidos durante el embarazo
El embarazo es una etapa de muchos cambios, donde el cuerpo de la futura madre sufre adaptaciones para traer al mundo a su bebé saludable y fuerte. La práctica de alguna actividad física es de suma importancia, ya que el sistema circulatorio de la madre debe mantenerse para que pueda irrigar de forma correcta la placenta y por consiguiente al bebé. Asimismo, el ejercicio físico le aporta muchos beneficios a la madre, previene la aparición de varices, los dolores musculares, permite relajarse y desestresarse. Además, un entrenamiento físico permitirá que la madre se mantenga activa y en su peso ideal, evitando la aparición de enfermedades como diabetes gestacional y preeclampsia. Mientras ninguna condición te lo impida, y tu médico no lo contraindique, puedes realizar algún ejercicio físico suave, durante el embarazo sin ningún problema.
El tipo de entrenamiento físico dependerá de la condición física, tipo de embarazo y posibles riesgos o enfermedades de base que presente la madre. No será igual un entrenamiento para una madre primeriza con un embarazo simple, que una con un embarazo múltiple o de alto riesgo.
Es importante que la embarazada no inicie de lleno el entrenamiento, lo ideal es iniciar despacio, 3 veces a la semana por 15 o 20 minutos como máximo, para que el cuerpo se vaya preparando y acostumbrando. Asimismo es de suma importancia la hidratación antes, durante y después del ejercicio, ya que esto intervendrá en gran medida con la eficiencia y resistencia que pueda llegar a desarrollar la futura madre.
A continuación te mencionamos los tipos de entrenamientos que están permitidos y son considerados seguros para realizarlos durante el embarazo:
- Caminata: Caminar es uno de los ejercicios más completos y sencillos de realizar para mantenerse activo y en forma. Es una actividad segura, accesible y que trae consigo beneficios cardiovasculares excelentes. Con un mono cómodo, una franela fresca y un buen par de zapatos deportivos, puedes llevar a cabo este ejercicio de manera rutinaria tranquilamente.
- Yoga: El yoga prenatal es una actividad muy integral, ya que representa un puente entre la mente, el espíritu y el cuerpo. Al trabajar con posturas y ejercicios de equilibrio, el yoga permite desarrollar una mayor elasticidad y flexibilidad de los músculos, fortalece la columna vertebral mejorando la postura, proporciona un estado de relajación y tranquilidad increíble, entre otros muchos beneficios. El yoga es un ejercicio de bajo impacto perfecto para las mujeres embarazadas. Además de lo mencionado, permite fortalecer los músculos de la pelvis, esencial para llevar a cabo el parto, así como un mayor control de la respiración. Lo mejor es que asistas a clases de yoga prenatal específicamente, ya que con la ayuda de un instructor que supervise cada postura y movimiento estarás más segura y habrá menor rango de error.
- Natación: La natación es un ejercicio muy recomendado por los especialistas para ser realizado por las mujeres embarazadas. Esto se debe a que es una actividad muy completa y sobre todo segura, que permite ejercitar y fortalecer los músculos de las piernas y brazos, controlar la respiración, mejorar la circulación y al estar en el agua, crear la sensación de ligereza, aliviando la presión causada por el aumento de peso.
- Baile: Bailar es una actividad que además de ofrecer beneficios cardiovasculares resulta muy divertida y entretenida. El baile es una de las experiencias más liberadora y desestresante que existe, que además de fortalecer los músculos y articulaciones, mantener activo el sistema cardiovascular y la respiración, ayuda a la oxigenación cerebral, al realiza toma de decisiones de forma rápida y despejar la mente. Puedes bailar en la comodidad de tu casa siguiendo tus propios pasos al ritmo de tu música favorita, o bien seguir una coreografía o inscribirte en una clase.
- Pilates: El pilates es otro de los entrenamientos más recomendados para las mujeres embarazadas. Es un ejercicio bastante completo, aeróbico, de bajo impacto y de estiramiento suave, por lo cual trae muchos beneficios para el cuerpo cambiante de la futura madre. Ayuda a desarrollar la flexibilidad, fortalecer los músculos y articulaciones y a controlar la respiración, permitiendo la relajación, todo al mismo tiempo. No dudes en practicar pilates.